Dijo Yuri Herrera que dijo Bolaño que dijo Cernuda: "Igual que si una losa te hubieran quitado de encima, vivías como un resucitado". Como cantó Lhasa de Sela soñó Caléxico disparó Ramón Ayala: "Qué bonitos son los hombres/no se les puede negar/aún después de caído/tuvo fuerzas para hablar/no corran, no sean cobardes/acábenme de matar". Ritmo: corrido. Rimel: corrido. Sexo: corrido. Nomás: pura vida pura muerte. Antes de rezar el Rosario, ora al desierto. Órale, güey. Mátame primero y pregúntame después si quiero vivir.
2 comentarios:
qué bien, Antonio. Ahí les has dado!
un beso fuerte
Amiga Jara!!!
Gracias por dejar huella por aquí. Me vine de México bastante sorprendido. Imágenes muy fuertes que recordaré. Un besazo.
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